La red Iniciativa de Custodia del Territorio en Islas Baleares (ICTIB) ha renovado su junta directiva con Gemma Capdevila como presidenta. La actividad de la ICTIB y de las cerca de 30 entidades que integran esta red abarca un amplio abanico de temas relacionados con la custodia, entre los que se encuentra la educación ambiental. Coordinadora del proyecto de “APS-Custòdia del Territori” del IES Joan Alcover de Palma, Gemma Capdevila ha desarrollado su actividad como profesora de Educación Física y de ciclos formativos en diferentes centros de Educación Secundaria. Desde su experiencia, destaca que la custodia del territorio “es una gran herramienta para la conservación del territorio en todas sus facetas, el medio natural y también elementos culturales, etnológicos y sociales”.
El primer contacto de Gemma Capdevila con el movimiento de custodia surge con el alumnado del ciclo de Actividades Físicas en el medio natural en una visita a unas fincas del programa de Custòdia agrària del GOB Menorca “para conocer una manera de gestionar el territorio de forma sostenible”.
La primera experiencia de incorporación de la custodia del territorio en las actividades educativas fue gracias a una iniciativa en la que participaron los alumnos del mismo ciclo en el IES Cap de Llevant de Maó. “Les planteamos una intervención en un pequeño bosque en muy mal estado cerca del centro, y les pedimos que redactaran un proyecto para su recuperación” explica. Formaron grupos a modo de cooperativa y se presentaron al concurso en el que un jurado compuesto por representantes del equipo directivo, del ayuntamiento y la coordinadora medioambiental eligieron el mejor proyecto. “Fue una grata sorpresa ver que al año siguiente el ayuntamiento de Maó decidiera llevar a cabo alguna de las propuestas que los alumnos habían presentado”.
Al curso siguiente, Gemma Capdevila se traslada a Palma de Mallorca, donde el equipo del proyecto de APS Serra de Tramuntana del IES Joan Alcover incorpora la custodia del territorio y firma un acuerdo con el Ayuntamiento de Bunyola y el GOB Mallorca.
Además de la educación ambiental, esta red da soporte a un amplio abanico de sectores. “La diversidad de ámbitos en que se mueven las entidades de custodia en nuestra red es enorme, lo que hace que las propuestas sean muy creativas y enriquecedoras”. Entre los aspectos novedosos y diferenciales de la custodia del territorio en el ámbito educativo, la presidenta de esta red destaca “la continuidad en el espacio y en el tiempo, así como el compromiso y el empoderamiento del alumnado como ciudadanos y ciudadanas responsables”. El alumnado custodia espacios que “serán de referencia para el centro colaborando en su conservación, estudio y mejora”, añade.
Por su parte, los estudiantes han valorado de forma muy positiva este tipo de iniciativas. “La respuesta es espectacular cuando se convierten en protagonistas y lo que hacemos es acompañarles y darles apoyo”, señala. En cambio, a nivel de profesorado, alerta de que el problema principal es la “falta de estabilidad para mantener la misma plaza durante años en los centros, estructuras temporales y físicas demasiado rígidas, así como la necesidad de apoyo para poner en marcha los proyectos”.
La custodia en el nuevo currículum escolar
Desde el grupo de trabajo de la ICTIB, se ha barajado la posibilidad de poner en marcha un proyecto piloto para incluir la custodia del territorio en el nuevo currículum escolar, en colaboración con la Conselleria d’Educació i Formació Professional del GOIB. “Algunas de las asignaturas encajan muy bien con los diferentes modelos metodológicos de la custodia”, adelanta.
Un factor limitante de la custodia del territorio hoy en día es “el relativamente escaso número de entidades de custodia”. A pesar de ello, destaca que “la experiencia de la ICTIB es muy buena. Hemos incrementado el número de afiliados y los proyectos gozan de una gran estabilidad” .
Entre los recursos que la ICTIB ha impulsado, se encuentra la publicación El mundo educativo y la custodia del territorio. Guía para la puesta en marcha de iniciativas de custodia del territorio en espacios educativos. (En catalán, ICTIB. 2020).
Esta guía muestra cómo implementar un proyecto de custodia en un espacio educativo con algunos ejemplos que funcionan en el territorio. “El objetivo es dar a conocer y motivar a cualquier entidad de cariz educativo a utilizar la custodia como herramienta educativa para la conservación”, explica.
En cuanto a la contribución de la ICTIB en la formación de jóvenes que pueden impulsar la custodia del territorio, Gemma Capdevila apunta que conocer esta herramienta aumenta las posibilidades de utilizarla posteriormente en la vida personal o profesional. “Aprender a organizarse y trabajar en equipo para superar retos complejos también es fundamental para incrementar la capacidad crítica, la autonomía, saber crear y gestionar grupos, y contribuye a la capacidad de liderazgo y la perseverancia en el compromiso”, concluye.
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