Óscar Prada forma parte del Foro Asturias Sostenible para el conocimiento y desarrollo del medio rural (FAS), una de las organizaciones promotoras de la Red Transcantábrica de Custodia del Territorio (RTCCT). Esta red, creada en el año 2011, trabaja para el desarrollo de la custodia del territorio en Asturias, Cantabria, País Vasco, y Castilla y León.
Las redes de custodia creadas hasta la fecha en España centran su actividad en una única comunidad autónoma. ¿A qué se debe que el ámbito territorial de la RTCCT sea una excepción?
El origen de esta iniciativa parte de Asturias. Cuando nos estábamos planteando hacer allí una red de custodia del territorio, nos dimos cuenta de que constituir una red que abarcase una sola comunidad autónoma podía quedar escaso. En principio, organizaciones de Cantabria propusieron crear una red astur-cántabra, e inmediatamente compañeros de Euskadi plantearon hacer una de toda la cordillera. La red transcantábrica nace en Salamanca, y es en este momento cuando los compañeros de Castilla y León, que estaban trabajando en la vertiente sur de la Cordillera Cantábrica, nos advierten de que la unidad territorial que está vertebrando esta iniciativa es toda la Cordillera Cantábrica en ambas vertientes: “ya que queréis trascender los límites administrativos, vamos a hacerlo de este a oeste y de norte a sur”. Esa fue la razón.
Vimos que, por aquel entonces,el marco que ofrecía el proto Foro de Redes y Entidades de Custodia del Territorio (FRECT), que aún no estaba constituido legalmente, permitía la posibilidad de que el ámbito territorial de la RTCCT abarcara varias comunidades autónomas. El FRECT Tenía un planteamiento flexible respecto a los terrenos e identidades de la custodia, que permitía que hubiera agrupaciones de entidades de custodia, sin que los límites administrativos de las provincias y comunidades autónomas fueran obligatoriamente los que tuvieran que definir de forma final una red. En esta fase inicial de creación de la red consultamos inmediatamente con el potente equipo del FRECT, entorno a cuestiones legales y nos dijeron que sí era viable la opción que planteábamos. Como he comentado, por entonces el foro estatal estaba en fase de creación por lo que nosotros teníamos este proceso como centro gravitatorio que estaba influyendo para que nos constituyéramos como red y, aceleráramos el proceso.
Las redes de custodia son proyectos compartidos entre diferentes personas y entidades. En este caso, ¿qué actores forman parte de la RTTCT?
En la actualidad somos 21 organizaciones. Mayoritariamente somos entidades que realizamos acuerdos de custodia del territorio, pero también hay de otro tipo. En esa constelación que se establece alrededor de la custodia del territorio hay diferentes tipos de elementos que forman parte de la misma, y que en sí, creo que determina la riqueza de esta manera de trabajar. Por ejemplo, forman parte de la RTCCT una empresa de consultoría ambiental, una pequeña empresa de educación ambiental, una red de grupos de desarrollo rural de Cantabria, y también hay un ayuntamiento, en concreto el Ayuntamiento de Villasana de Mena. En el ecosistema de nuestra red, estos son los elementos fundamentales. Lógicamente, el peso está en las entidades que realizan custodia del territorio, algunas con una trayectoria muy dilatada y con mucha superficie y grandes éxitos en su haber, y otras más modestas en su naturaleza organizativa y respecto al territorio que abarcan, pero con una evidente compenetración y compartiendo unos valores y una manera de trabajar.
¿Qué rasgos diferenciales destacarías de la RTCCT respecto a otras redes de custodia del Estado español?
Le daría la vuelta a la pregunta, en la medida de lo posible intentamos emular a nuestras compañeras, las redes. Intentamos parecernos en todo lo bueno que es mucho, porque cada una de las redes que existen en España comparten un modelo de trabajo en red, generoso, de transparencia, sinérgico, incluso más allá. Para todos nosotros, en el movimiento de custodia del territorio, el modelo de la Xarxa de Custòdia del Territori es el ejemplo, y está claro que haciéndolo como lo han hecho ellos se avanza en el buen camino. La idiosincrasia cultural de cada uno de los territorios es diferente y eso también es una riqueza, pero creemos que el modelo es tan flexible que hay muchos aspectos de esta manera de trabajar que se pueden cumplimentar en diferentes sitios. Dicho esto, no tenemos ninguna intención de diferenciarnos de los demás, sino en la medida de lo posible replicar el modelo.
Es cierto que, volviendo otra vez a lo que el FRECT supone como estructura que articula todas las redes, en este trabajo que hemos hecho conjuntamente entre todos, hemos sabido definir un grado de flexibilidad. Es ahí donde efectivamente tenemos un aspecto diferenciador del resto de redes. Antes hemos mencionado el tema geográfico, pero tenemos otro aspecto que es el tema organizativo. Nosotros no nos hemos constituido como una asociación formalmente, optamos por otra vía que el propio foro nos permitía, que fue la de un acuerdo, replicando el modelo de custodia del territorio. Un acuerdo voluntario. No ir tanto a la forma sino al contenido, y la forma ya se va gestando a medida que el contenido se desarrolla. Esa misma forma de trabajar que tiene la custodia, la hemos aplicado a nuestra propia organización, lo cual creo que es muy inteligente, porque tenemos una manera de trabajar fractal, y por tanto hay una autosemejanza en el modelo local con el modelo regional, e incluso con el modelo estatal y más allá. Lo que hemos hecho ha sido definir un convenio de colaboración en base a unos principios y objetivos, y firmarlo con todas las entidades que participan. Como inicio me parece muy bueno. Ahora vamos a ver como trabajamos, no vamos a cargar con demasiadas alforjas al burrico, no vaya a ser que no pase de la primera curva. Queremos trabajar como hace un río, labrando su propio cauce, a medida que avanza en el territorio. Por ahora llevamos año y medio, y creo que hasta ahora ha sido una buena decisión.
Hay otras redes que están empezando, concretamente me refiero a la red de Castilla la Mancha-Madrid, en la que se está replicando el modelo que hemos utilizado en la Red Transcantábrica. En lo territorial, en el sentido de que trascendemos los límites de una comunidad autónoma para estar en dos, y también en lo organizativo, en el sentido de que no estamos trabajando inicialmente por una asociación formalmente. Venía aquí a hablar de la transcantábrica, pero como veis los límites en la custodia del territorio no es algo que nos pare. De hecho, vemos los límites como membranas, como lugares donde se produce el tránsito de los conocimientos, de las ideas, de las iniciativas, de los recursos.
La RTTCT, ¿Qué quiere y puede aportar al desarrollo de la custodia del territorioy al fomento de esta estrategia de conservación en el ámbito estatal?
Nuestro objetivo principal es reforzar la custodia del territorio como herramienta para la conservación de la naturaleza en ambas vertientes de la Cornisa Cantábrica.Que la custodia del territorio se conozca, se utilice, se refuerce y que con el uso se mejore, con todo lo que eso significa. Es decir, que la implicación de propietarios, de la sociedad civil y de la propia administración sea cada vez mayor y más eficiente con unos resultados satisfactorios tipo “bola de nieve”. Claro está, de forma que la custodia del territorio salga reforzada, porque muchas veces vas con buena intención y puedes perder el foco.
Inicialmente, lo tenemos muy claro, queremos fortalecer la custodia del territorio como herramienta de conservación de la naturaleza, donde la sociedad civil, los propietarios, las entidades de custodia, y el lazo que se establece entre ellos tienen el protagonismo.Es en este encuentro donde realmente está el poder, y nosotros queremos reforzarlo. A su vez, el hecho de definirnos trascendiendo los límites administrativos, tiene una enseñanza importante, porque no nos constriñen.
Queremos reforzar la custodia en toda la transcantábrica y en todo el Estado español, e ir más allá, porque esta manera de trabajar no tiene límites, viene del mundo anglosajón, y nosotros que tenemos otra manera de legislar, de relacionarnos con el territorio respecto a la propiedad y a la conservación, la estamos adaptando y creo que con relativo éxito. En lo que se refiere a custodia del territorio ese es el objetivo. Hay otras personas o entidades, que más allá del tiempo, podemos ver la custodia del territorio no sólo como una herramienta de conservación de la naturaleza, sino como una herramienta democratizadora, que facilita que diferentes agentes que tienen un grado de confianza mejorable entre sí lo mejoren.Y cuando en la sociedad se incrementa la confianza, se incrementa la gobernabilidad, la eficiencia política. Por ello, creo que la custodia del territorio tiene una trascendencia más allá de lo que son los recursos naturales, la biodiversidad, y el reconocimiento a los propietarios que apuestan por esto. Es otra manera de construir ciudadanía.